La historia Incoclusa (dedicada)

Se aconseja leer con el "diccionario de cosas bizarras de Arlekin" en mano:

Pasa las 12 de la madrugada, el 01 de marzo del presente año. "Disculpa... ¿me puedes decir que hora tienes?" fue lo que rompió el silencio en aquel lugar. Horas y horas vinieron después, inagotable conversación, interesante, rápida, fluida y sobre todo, siempre interesante. ¿Cabalga entonces el “príncipe azul” en un corcel blanco? Las paradojas están a la vuelta de la esquina. ¿Señales? Los tiempos han cambiado, y con el las princesas y los príncipes y todos los cuentos de antaño.
YA NO ES OBLIGATORIO QUE EL HOMBRE TOME LA INICIATIVA, ¿cierto?... así debería ser, nos alivianaría el trabajo a quienes somos un poquito flojitos. CORAJE, INTENSO, OBJETIVO, REALISTA, SOÑAR MENOS Y VIVIR MAS, ¡esto va dedicado!

SE DAN CUENTA QUE SOY DE CORAZON BLANDO COMO TODOS, Y QUE LO EXTERIOR ES SOLO UNA IMAGEN (importante, no es pose).

Viaje de la capital, de regreso al hogar. Algo encontré, que me sorprendió y que me saco de posición. Definitivamente estaba escrito. Todavía me faltan piezas, incluso me sobran otras. La avispas aun están en las calles y no se como escapar de ellas, aunque, se que la solución no es escapar sino sacarlas de ahí… prefiero esperar a que las calles se limpien solas, pero no se cuanto tiempo llevará.
El ataúd esta abierto, todavía. Sangra a veces, no es grabe pero si molesto. No puedo ver con claridad.
A veces creo que es mejor destruir todo y quedar solo en el desierto, pero cuando me decido a tomar este camino aparece alguien sentado al otro lado del pasillo que me hace dudar de mis creencias.

“Uff! Que intenso, ¿no?”